Mosaicos

Al igual que vimos con la pintura, el mosaico tiene sus antecedentes en el mundo helenístico. Se introducirá en Roma por medio de mosaístas griegos, y no será hasta la época plena del Imperio, cuando pase a manos de los artistas romanos. La finalidad de éste era enriquecer y decorar lo más posible las estancias mediante presentaciones de los grandes temas de la pintura mural y de caballete, con un gran cromatismo. La técnica generalizada era la de opus tessellatum, que consistía en una serie de teselas, pequeños cubos de medio centímetro aproximadamente, que solía ser de mármol, pero también podía encontrarse de azulejo, vidrio coloreado o cerámica.
Debemos destacar cuatro tipos de mosaicos:

  • Mosaico de alfombra: tiene su esplendor durante el siglo II d.C. Se componen temas geométricos y floreados por medio de teselas marmóreas de diversos colores, tendiendo a ser de blanco y negro. Podemos observar magníficos ejemplos en Itálica, Sevilla.

    Mosaico de alfombra con motivos florales (Sevilla, excavaciones de Itálica). Fuente en: http://bit.ly/2hmI8x2
    Mosaico de alfombra con motivos florales (Sevilla, excavaciones de Itálica). Fuente en: http://bit.ly/2hmI8x2
  • Mosaico de alfombra con figuras: esta tipología combina los modelos geométricos y floreados anteriores con pequeños paneles que albergan figuras y pequeñas escenas, como el llamado Mosaico de la Loba, donde se representa la loba capitolina en un círculo central, que se encuentra en el Museo Arqueológico de Córdoba.

    Mosaico de las figuras (Córdoba, Museo Arqueológico; procedente de Alcolea del Río). Fuente en: http://bit.ly/2hmHIXJ
  • Mosaico helenístico: se dio durante los siglos II, III y IV. Se denomina así puesto que consistía en reproducir los cuadros más famosos del mundo griego cásico, postclásico y helenístico. Se trata, como dice Olagüer-Feliú, de la muestra de una fidelidad romana hacia los maestros helenos del pasado, que se observa no solo aquí sino también en las pinturas murales y de caballete.

    Mosaico de las Tres Gracias (Barcelona, Museo Arqueológico). Fuente en: http://bit.ly/2hqig46
    Mosaico de las Tres Gracias (Barcelona, Museo Arqueológico). Fuente en: http://bit.ly/2hqig46
  • Mosaico costumbrista: fue el más extendido por las provincias del Imperio, sobre todo encontrándose en las viviendas menos importantes y casas de campo. Esto no quiere decir que sean de peor calidad, sino que busca la representación de escenas de la vida cotidiana, paisajes decorativos, representaciones animalísticas lo más reales posibles, algunos temas anecdóticos, en contraposición con las tipologías anteriores, que buscaban simetría, simbolismo y una mirada al pasado griego. Por tanto, son muy frecuentes las escenas de caza y pesca. Tampoco faltan las escenas de anfiteatro con luchas de animales y cacerías, ni el paisaje, que se buscaba representar lo más realista posible.
Mosaico de los pescadores (Trípoli, Museo del Castilo; procedente de la Villa del Nilo de Leptis Magna). Fuente en: http://bit.ly/2gxArrr
Mosaico de los pescadores (Trípoli, Museo del Castilo; procedente de la Villa del Nilo de Leptis Magna). Fuente en: http://bit.ly/2gxArrr

Por último destacar los mosaicos de Piazza Armerina, al sur de Sicilia, fechados entre el 310 y el 330, encontrados en 1929, ya que se trata del conjunto de mosaicos romano más extenso e importante de los que se conservan hasta ahora, presentando una superficie de 3.500 metros cuadrados.

Bibliografía:
Olaguer-Feliú, F. (1989): La Pintura y el Mosaico Romanos, editorial vicens-vives, Barcelona, págs. 37-43

Otras temáticas murales

En la anterior entrada vimos como los grandes murales podían decorar el interior de la casa. Pero estos son solamente un aspecto dentro de la pintura romana. En esta entrada vamos a ver los pequeños frescos que muestran una gran diversidad de temáticas y que nos ayudan a comprender la riqueza creativa romana.

La pintura de historia

Durante toda la República y el Imperio, eran constantes los frescos que recogían acontecimientos históricos importantes del pasado de Roma. Era una pintura narrativa que servía como arma propagandística, con el objetivo de exaltar a las figuras principales. Las podemos encontrar ya en el siglo III a.C., mucho antes de los grandes murales comentados anteriormente. Aparecen denominadas como pinturas triunfantes, ya que representaban campañas ganadas, y que luego desfilaban por roma, en el cortejo triunfal con el que se cerraban todas las guerras. Durante el Siglo II a.C., pasaron a denominarse species simulacrorum, apareciendo figuras alegóricas que representaban ciudades conquistadas y pueblos sometidos.

Debemos decir que desde el siglo I a.C. constituyeron una costumbre arraigada en Roma. Destacables son las pinturas encargadas por Pompeyo tras sus victorias en Asia, que desfilaron por Roma en el 61 a.C., donde aparecen las principales escenas de la guerra y enemigo vencidos.

El paisaje

Hay que recordar que el mundo romano fue un mundo de campesinos. Esto es algo que aparece reflejado en la literatura, en la poesía, pero también en la pintura. Hay que destacar hasta cuatro tipologías:

Paisaje idílico-sacro: era el escenario de un hecho mitológico, marcos perfectos para que tengan lugar acciones divinas, como podían ser bosques sagrados, cavernas, playas,… que aparecen con un carácter solemne y misterioso.

Frescos de Ulises en el país de los lestrigones (Roma, Biblioteca Vaicana;procedente del Esquilino). Fuente en: http://bit.ly/2gsV7f7
Frescos de Ulises en el país de los lestrigones (Roma, Biblioteca Vaicana;procedente del Esquilino). Fuente en: http://bit.ly/2gsV7f7

Paisaje campesino: se busca la representación realista de las vistas campestres, con personajes populares que visten jumentos y tartanas; con aldeas rurales; y aldeanos cazando, pescando y trabajando.

Paisaje ciudadano: se representan vistas de calles, villas residenciales y puertos. No suelen aparecer personajes, puesto que se busca solamente la obra del hombre, en contraposición con las de naturaleza.

Paisaje de jardines: se emplearon para decorar los muros que rodeaban los patios y jardines de las casas patricias, creando la ilusión de una mayor amplitud de estos.

Fresco que representa un jardín (Roma, Casa de Livia). Fuente en: http://bit.ly/2hq2bve
Fresco que representa un jardín (Roma, Casa de Livia). Fuente en: http://bit.ly/2hq2bve

Los ciclos mitológicos

Esta temática tiene un carácter sacro, representando escenas de dioses y héroes, apareciendo una serie de mensajes y simbolismo dirigidos a los hombres. Destacan las pinturas sobre Venus, usándose también como alegoría, ya que es la diosa del amor, de la belleza, e incluso apareciendo como simbolismo de la fortuna y del éxito. Otra temática pudo ser la de los sacrificios y ofrendas a Dionisos, relacionado con las debilidades del hombre, cuyos vicios son fomentados por el dios del vino.

Fresco de Venus llegando a Citera sobre una concha (Napoles, Museo Arqueológico Nacional; procedente de las nuevas excavaciones de Pompeya). Fuente en: http://bit.ly/2hmu3zF
Fresco de Venus llegando a Citera sobre una concha (Napoles, Museo Arqueológico Nacional; procedente de las nuevas excavaciones de Pompeya). Fuente en: http://bit.ly/2hmu3zF

Tampoco debemos olvidar otros asuntos como los relativos a las ninfas, centauros, sátiras y otros seres mitológicos de la naturaleza. Por último, hay que mencionar la temática que aborda los castigos ejemplarizantes, como el que el de Dirce por sus hermanos, que debe de ser atada a un toro salvaje, para su despedazamiento

El bodegón y la pintura animalística

El bodegón estará presente desde el siglo I d.C. hasta la caída del Imperio. Se muestran composiciones donde aparecen frutas, animales muertos y objetos de metal y cristal. En relación con estos bodegones, está la pintura animalística, ya que ambos están en relación con una decoración naturalista, tanto los frutos como los animales son propios de la naturaleza y de la vida.

La pintura de género y los temas teatrales

La pintura de género representa acciones de la vida cotidiana, tanto en las calles como en el interior de las casas. Los temas frecuentes son escenas de comercios, como La panadería, o La taberna, donde aparecen bebedores en torno a las mesas, apareciendo incluso alguna pelea de borrachos. Presentan una gran movilidad y vivacidad. Sin embargo, las que son ubicadas en el interior de las casas muestran sosiego y quietud, como en el caso de la Muchacha vertiendo perfumes, o la Escena de gineceo, donde dos matronas conversan calmadamente, mientras son atendidas por su sirvienta.

La taberna (Nápoles, Museo Arqueológico Nacional). Fuente en:http://bit.ly/2hmwNgL
La taberna (Nápoles, Museo Arqueológico Nacional). Fuente en:http://bit.ly/2hmwNgL

En cuanto a la temática teatral, podemos decir que se trata del reflejo del IV Estilo mural, que vimos en la anterior entrada, pero en menor tamaño. Aparecen temáticas ilusionistas típicas de este estilo.

El retrato

El retrato comenzó en el siglo I a.C. con artistas griegos que se afianzaron en la península italiana. Será en los últimos años de la República cuando pase a ser una práctica realizada por pintores romanos. Del siglo I, en Pompeya se ha conservado buenos ejemplos, como el Retrato de una muchacha, o el Retrato de Paquiao Próculo y su mujer. Pero seguramente los más importantes son los que proceden de El Fayum, un amplio oasis en el desierto líbico del Egipto Medio, donde se asentó una prospera comunidad romana, debido a la gran fertilidad del lugar. En su mayoría son representaciones de hombres y mujeres jóvenes, lo que nos puede hacer pensar en una posible idealización por parte del pintor.

Muchacha vertiendo perfumes (Roma, Museo de las Termas; procedente de la Casa Farnesina). Fuente en: http://bit.ly/2gsYnHg
Muchacha vertiendo perfumes (Roma, Museo de las Termas; procedente de la Casa Farnesina). Fuente en: http://bit.ly/2gsYnHg

Representaciones del arte y de la ciencia

No se da con tanta frecuencia como los anteriores. Estaba presente sobre todo en mansiones patricias cuyos dueños hayan sobresalido en ambientes intelectuales. Dentro de las representaciones del arte se usaba la propia pintura como alegoría, mostrándose una mujer, joven y hermosa, pintando un cuadro de caballete. Se muestra una mujer, puesto que simboliza la belleza y delicadeza propia del arte, y aparece pintando en un cuadro de caballete, puesto que es juzgado como una modalidad superior a la pintura mural

Para terminar, las representaciones de la ciencia es fruto de la filosofía científica que tiene lugar en época de Nerón, y se centra en aspectos antropológicos y cosmológicos, siendo el tema de los planisferios el tema más representado, como el de la ciudad de Stabies.

Bibliografía:

Olaguer-Feliú, F. (1989): La Pintura y el Mosaico Romanos, editorial vicens-vives, Barcelona, págs. 24-36